Para nosotros, que amamos la naturaleza, su fauna y flora,
nos parece impensada la posibilidad de cometer actos de crueldad o violencia
contra los animales. Por ello, escribir sobre el maltrato animal es siempre una
experiencia tan difícil y compleja, que nos moviliza de diferentes maneras y,
sobre todo, nos invita a reflexionar sobre nuestra sociedad y la naturaleza del
ser humano.
¿Qué es el maltrato animal?
No es fácil llegar a una definición precisa de maltrato
animal, ya que existen muchas formas de someter un animal a condiciones
inapropiadas, dolorosas o indignas. Además, no siempre el sentido común sobre
qué es el maltrato animal coincide con la definición expresa en los instrumentos
legales de nuestra sociedad.
Si nos guiamos por la lógica y el sentido común, podemos
decir que el maltrato animal es toda y cualquier acción o contexto que implica
sufrimiento, humillación, dolor físico o psicológico a un animal de compañía o
silvestre. Lamentablemente, aún es relativamente común que se deje a un lado
aquellos animales que son explotados por la industria alimenticia con la única
finalidad de servir al consumo humano, y cuyas condiciones de vida suelen ser
lamentables.
Por otro lado, si nos guiamos por los términos legales,
observamos que el concepto y las sanciones aplicables al maltrato animal pueden
variar según el país, región o comunidad autónoma.
¿Cómo evitar el maltrato animal?
La prevención y el combate al maltrato animal requiere que
todos, como ciudadanos y amantes de los animales, nos involucremos. En primer
lugar, debemos ser conscientes a la hora de adoptar a un animal de compañía.
Antes de decidirte por concretar una adopción, es indispensable considerar si
tienes la disponibilidad de tiempo y de espacio, la disposición para dedicarte
y la solvencia económica necesaria para proporcionar una óptima calidad de vida
a este animal. Las mismas consideraciones son válidas y esenciales si piensas
regalar una mascota a otra persona, principalmente si se trata de un niño.
Además, todos podemos hacer nuestra parte en el combate al
tráfico de especies exóticas y a la explotación indiscriminada de animales en
el mercado de compraventa. ¿Cómo? Simple: adoptando y promoviendo la adopción
responsable, así como colaborando con protectoras o refugios en este trabajo
tan importante. Si no puedes hacer donaciones, considera hacer trabajo
voluntario o utilizar tus redes sociales y tus grupos de amigos para fomentar
la adopción y el respeto hacia la vida de los animales.
Otra actitud fundamental para comprometerse con la causa del
bienestar animal es denunciar los casos de maltrato animal. Si miramos para
otro lado e ignoramos que un animal es víctima de crueldad o trato indigno, nos
convertimos en cómplices de esta situación que es, en realidad, un problema
social.